Los Buenos Veranos
Zidrou y Jordi Lafebre
Norma Editorial
La editorial Norma ha tenido a bien recopilar en una cuidada edición integral una de las obras maestras de los últimos años a cargo de una dupla creativa de proporciones épicas: el guionista Zidrou y el dibujante Jordi Lafebre.
La historia que aquí se nos plantea es el periplo vacacional de la familia belga Faldérault a lo largo de los últimos años sesenta y años setenta. Un periplo en el que vemos como la familia va creciendo paulatinamente (el único que se mantiene parcialmente inalterable es el celebérrimo 4 Latas, “Bermellón”) y donde el creador expresa de altamente sensitiva y emotiva las aventuras y desventuras, románticamente idealizadas por composición de personajes y lugares, de esta peculiar familia, desde el padre dibujante de tebeos, pasando por una madre hercúlea en su actitud y en su forma de encarar la vida, así como en los satélites familiares como la inquisitiva abuela materna o el maravilloso abuelo paterno y su condición de exiliado español por motivo de la dictadura de Franco.
El dibujo de Jordi Lafebre complementa a la perfección la narrativa de Zidrou. Sus ilustraciones detalladas, estilizadas, evocadoras, bucólicas y expresivas capturan la atmósfera de los diferentes años en los que transcurre la historia de las vacaciones de tan entrañable familia y dan vida a los personajes de una manera que invita a sumergirse en la narración. Lafebre logra transmitir las emociones sutiles y los matices de cada situación, contribuyendo significativamente al encanto general de la obra.
Además de la nostalgia y el humor, la novela gráfica aborda temas universales como el paso del tiempo, la importancia de la familia y la inevitabilidad de los cambios. Zidrou logra equilibrar estos elementos de manera magistral, ofreciendo una obra que no solo entretiene, sino que también invita a la reflexión.
Lo memorable de «Los Buenos Veranos» es la maestría con la que Zidrou captura la esencia de la infancia y la adolescencia, en definitiva, del paso del tiempo. Utiliza un tono humorístico y a la vez tierno para narrar las travesuras, los descubrimientos y las pequeñas victorias de los niños Faldérault. La historia está impregnada de la inocencia y la magia propias de la niñez, creando así una conexión entrañable con el lector.
«Los Buenos Veranos» es una joya narrativa que combina la maestría narrativa con la habilidad artística de las viñetas que pasan amablemente por cada una de las páginas de este magnífico tomo.
A través de la vida cotidiana de la familia Faldérault, la obra nos sumerge en un viaje emotivo y divertido que celebra la infancia, la familia y los inolvidables buenos momentos de la vida.
Redacción: Juan A. Ruiz-Valdepeñas