Blur Vs Oasis. La eterna discusión
Pasarán más de mil años, pasarán y seguiremos confrontando a ambas bandas en revistas (las que queden en pie tras las innumerables crisis del sector), webs, programas de radio y de televisión.
Son casi treinta años de enfrentamiento (el primer álbum de Blur data de 1991 y Oasis hizo su debut en 1994), cuyo momento de máximo apogeo coincidió con la publicación de algunos de los discos más sensacionales de la música independiente mediados de los años noventa: Definitely Maybe y (What´s the Story) Morning Glory? De Oasis y Parklife y The Great Escape de Blur, en plena eclosión de lo que fue denominado Britpop. En esta época, además de un éxito atronador y global, se deslizaron enfrentamientos de diverso tipo, que van desde el amarillismo puro y duro agitado por delirios etílicos y toxicológicos, hasta el enfrentamiento de medios musicales por ver quien se proclamaba ganador de tan cruenta batalla, hasta cuestiones de tipo político derivada de su extracción social y geográfica.
La carrera de ambos discurrió en paralelo durante finales de la década de los noventa y principios del nuevo milenio. Bien es cierto que en el caso de los de Manchester, sus discos fueron cayendo en calidad en picado a pesar de su éxito a la hora de congregar masas ingentes en conciertos que, a su vez iba en paralelo al distanciamiento de los hermanos Gallagher que terminaron por devorarse a si mismos y a su grupo. Con posterioridad, ambos emprendieron carrera en solitario, con algún que otro acierto, mientras se sigue especulando sobre una posible reunión que ellos mismos han alentado en esta época de pandemia.
Por su parte, Blur, también adoleció de una bajada de rendimiento en sus posteriores discos, a pesar de lo cual mantuvo una postura más digna que sus competidores. Lo que nadie puede negar es que los proyectos en solitario que desarrollaron tuvieron una repercusión e influencia notable, sobre todo los nacidos a la estela de Damon Albarn Ahí está Gorillaz y también está el genial proyecto The Good, The Bad and The Queen e incluso su propio disco en solitario de. A destacar también la excelente trayectoria en solitario del guitarrista Graham Coxon, cuya obra más reciente es la banda sonora y selección de canciones de la exitosa serie The End Of The Fucking World.
Blur y Oasis han creado auténticos himnos generacionales que siguen conmocionando cada vez que se pinchan en un bar o en una fiesta casera (¿quién no se ha venido arriba con Song 2, Wonderwall, Girls and Boys o Don´t Look Back in Anger); siguen siendo fuente inagotable de noticias, el pan sube cada vez que hablan los Gallagher, se ansía una reunión de ambas bandas… Podrán transcurrir años y más años y aún se sigue hablando de ellos y escuchando su música.
Ahora bien, ¿con quién os quedáis? ¿Oasis o Blur?
Redacción: Juan A. Ruiz-Valdepeñas