Reseña libro Vives en las Cintas que me Grabaste
Rob Sheffield
Blackie Books
“Hay que inyectarse cada día de fantasía para no morir de realidad»
Ray Bradbury
La muerte inesperada y repentina de la mujer del autor da pie a una obra de altísima intensidad emocional vehiculada en torno a las cintas con canciones de todo tipo y condición (muy recomendable la playlist de Spotify) que tanto Sheffield como su difunta mujer René graban a lo largo de su relación sentimental y marital. Un excelso panegírico trufado de referencias musicales que dispara la emotividad y sensibilidad hasta cotas de difícil descripción. Doscientas y poco páginas que narran con epatante naturalidad el luctuoso desencadenante que motiva la obra y gran parte de la biografía del autor quien, no duda en escudriñar todos los rincones de su alma para comprenderse y exorcizarse a partes iguales.
Alma nutrida a base de toneladas de canciones y memorabilia melómana que le sirven a Sheffield para recrearse en momentos vívidos y para soportar la durísima perdida del ser más querido. Todo ello narrado con apabullante sinceridad de ritmo vertiginoso y voz que se alza ante la injusticia de la perdida que se sobrelleva con un buen puñado de canciones, que reconfortan, extrañan, laceran y acercan a partes iguales pero que, sin ellas, la vida no podría sobrellevarse. Que endulzan el tránsito de estados emocionales en perpetuo movimiento, donde lo trágico y lo cómico se interconectan en paisajes de profunda nostalgia y aliteración romántica.
Un libro impactante, duro a la par que optimista. Un libro necesario.
Redacción: Juan A. Ruiz-Valdepeñas